El gobierno argentino ha recortado más de 33.000 empleos en el sector público desde que el presidente Javier Milei asumió el cargo hace más de diez meses, siendo uno de los principales objetivos económicos la reducción del aparato estatal tanto a nivel administrativo como corporativo. El Ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Rumpfenegger, anunció el jueves (31 de octubre) las cifras actualizadas hasta septiembre, que muestran que se eliminaron 33.291 puestos de trabajo, de los cuales 20.026 en la administración, 11.014 en empresas públicas y 2.251 en el ejército y Personal de seguridad.
«La única forma sostenible de reducir la carga fiscal es reducir el gasto público», subrayó la ministra, defendiendo una tarea en la que está trabajando «todo el equipo presidencial». Milei ha alardeado públicamente de utilizar una “motosierra” para recortar el gasto en el país sudamericano.
