Argentina: FMI da luz verde a 800 millones de dólares

El directorio del Fondo Monetario Internacional (FMI) despejó el jueves (13) el camino para que Argentina reciba 800 millones de dólares. El dinero está destinado a promover la recuperación económica del país vecino de Chile, Bolivia, Paraguay, Brasil y Uruguay. La república del sur de Sudamérica tiene un programa de 44.000 millones de dólares con el FMI que incluye objetivos económicos de crecimiento, inflación y reservas. El FMI dijo en un comunicado que su Directorio Ejecutivo había completado la octava revisión de este acuerdo de fondo ampliado.

“Después de completar la revisión, el Directorio Ejecutivo concluyó que el programa va por buen camino y que todos los criterios cuantitativos de desempeño se han cumplido dentro de los márgenes para fines de marzo de 2024”, dijo el FMI. Para sostener el progreso es necesario mejorar la calidad del ajuste fiscal, tomar medidas hacia un mejor marco de política monetaria y monetaria e implementar reformas para el crecimiento, dijo el FMI. El gobierno argentino ha anunciado que iniciará conversaciones con el FMI sobre un nuevo programa.

La aprobación del FMI se produjo después de que el presidente Javier Milei, quien asumió el cargo en diciembre, implementara amplias reformas tributarias y recortara drásticamente el gasto gubernamental para combatir una inflación de tres dígitos, una economía en contracción y las reservas rojas. Los cambios que instituyó han ayudado a Argentina a reponer las agotadas reservas de divisas, lograr superávits presupuestarios a principios de año y estabilizar el peso.

La tasa de inflación mensual de Argentina en mayo fue la más baja desde 2022, según mostraron los datos oficiales el jueves. Cayó al 4,2% por quinto mes consecutivo, en medio de las medidas de austeridad del liberal Milei. Aún así, el gobierno enfrenta un desafío a medida que la economía se estanca y la pobreza aumenta. El FMI dijo que Argentina debe hacer más esfuerzos en el futuro para apoyar a los vulnerables, ampliar el apoyo político y garantizar políticas «ágiles».